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10 Errores frecuentes al iniciar el proceso de pensión: ¿Que evitar?

Escrito por Jan Nevada | Jul 5, 2025 6:51:09 PM

10 Errores frecuentes al iniciar el proceso de pensión: lo que sí puedes evitar

Lectura estimada: 9 min
Actualizado: 6 de julio de 2025

Introducción  

Cuando el error cuesta semanas (y tranquilidad)

El momento de tramitar la pensión debería ser el cierre digno de una etapa laboral, pero para muchas personas se convierte en una fuente de estrés. Esto no ocurre por casualidad: gran parte de los problemas que enfrentan quienes inician este proceso se deben a errores evitables.

El objetivo de esta entrada es simple: mostrarte qué fallas se repiten con frecuencia en la experiencia de cientos de personas y cómo tú puedes anticiparte. No necesitas ser experto en trámites, solo necesitas información clara y oportuna.

 

1. No verificar tu CURP ni tu NSS

Parece increíble, pero uno de los errores más frecuentes ocurre desde el dato más básico: la Clave Única de Registro de Población (CURP) y el Número de Seguridad Social (NSS).

¿Qué puede salir mal?

  • CURP mal capturada en los registros del IMSS.

  • NSS duplicado (por ejemplo, si alguna vez cotizaste en otro estado o empresa sin unificar registros).

  • Desfase entre los datos del AFORE y los del IMSS.

Un CURP incorrecto puede invalidar semanas cotizadas. Un NSS mal vinculado puede desaparecer años enteros de tu historial laboral.

Lo que sí puedes hacer: revisa tus datos directamente en la plataforma del IMSS y valida que tu NSS coincida en todos tus documentos (AFORE, empresa, recibos, clínica).

 

2. Confiar en información de pasillo o rumores

“Mi vecino me dijo que si me espero hasta los 65, me dan más”, “Un compañero del trabajo me aseguró que ya con 500 semanas me van a dar algo seguro”… Frases como estas pueden sonar tranquilizadoras, pero muchas veces son imprecisas o francamente falsas.

El problema

Cada caso es diferente. Factores como edad, salario promedio, número de semanas cotizadas y tipo de régimen aplicable (73 o 97) hacen que una estrategia útil para una persona sea completamente ineficaz para otra.

Lo que sí puedes hacer: acércate a fuentes oficiales como el IMSS, la CONSAR y consulta normativas vigentes como la Ley del Seguro Social (última reforma). O mejor aún, acércate a un asesor que te explique tu situación con base en tu NSS y tu historial real.

 

3. No tener tu Expediente Electrónico completo en tu AFORE

Desde 2019 es obligatorio contar con el Expediente Electrónico en tu AFORE para poder iniciar el trámite de pensión. Y sin él, simplemente no podrás avanzar.

¿Qué incluye el expediente?

  • Identificación oficial vigente

  • CURP

  • Comprobante de domicilio

  • Fotografía

  • Firma biométrica

Muchas personas dejan este paso para el final o piensan que ya lo tienen “por default” por el solo hecho de estar afiliadas a una AFORE. Error. Este expediente debe estar completo y activo.

Lo que sí puedes hacer: agenda una cita con tu AFORE y solicita revisión o apertura de expediente. Hazlo con tiempo; en temporadas altas, las citas pueden tardar semanas.

 

4. No anticipar la fecha de baja

Para iniciar un trámite de pensión bajo la Ley 73 es indispensable estar dado de baja del régimen obligatorio del IMSS. Aquí es donde muchas personas cometen uno de los errores más serios:

  • Se dan de baja sin plan previo

  • Se dan de baja y esperan demasiado tiempo

  • No se dan de baja y quieren iniciar el trámite

Consecuencia

Sin baja no hay pensión. Pero además, si pasa demasiado tiempo después de la baja, puedes perder el derecho a continuar en la Modalidad 40 o incluso el derecho a pensión (según semanas cotizadas y el tiempo transcurrido).

Lo que sí puedes hacer: planea tu fecha de baja con anticipación. Verifica si conservarás tus derechos y si estás en tiempo para estrategias complementarias como la Modalidad 40.

 

5. No reunir todos los documentos antes de iniciar

Hay documentos clave que deben coincidir entre sí. Si no están correctos, tu trámite puede retrasarse o pausarse indefinidamente:

  • Acta de nacimiento sin errores

  • Identificación oficial vigente

  • CURP actualizado

  • RFC válido ante el SAT

  • Comprobante de domicilio no mayor a 3 meses

  • Estado de cuenta de la AFORE

Errores comunes incluyen actas con nombres mal escritos, direcciones desactualizadas, CURP con dígito equivocado, o RFC no vinculado al SAT.

Lo que sí puedes hacer: arma una carpeta con todos tus documentos escaneados y en físico. Revisa especialmente los nombres completos y las fechas. No esperes a que el IMSS te los solicite para darte cuenta de que algo está mal.

 

6. Ignorar tu constancia de semanas cotizadas

El documento más importante en este proceso es la constancia de semanas cotizadas. Contiene tu historial laboral y servirá como base para calcular tu pensión.

Errores comunes

  • No solicitarla antes de iniciar el trámite

  • No revisar que estén todas las semanas

  • Creer que “seguro están bien” porque “ya trabajé muchos años”

Este documento puede tener omisiones por cambios de patrón, cotizaciones irregulares, falta de actualizaciones o errores en capturas.

Lo que sí puedes hacer: descárgala desde el portal del IMSS y revísala. ¿Todas tus semanas están reflejadas? ¿Hay periodos en blanco? ¿Tu salario base está correcto?

 

7. No calcular tu pensión antes de iniciar el trámite

Muchas personas se presentan a la ventanilla del IMSS sin tener idea de cuánto recibirán. Y lo peor: una vez que aceptas tu pensión, no puedes revertirla.

Sin un cálculo previo, podrías estar aceptando una pensión baja por no esperar unos meses más o por no hacer una estrategia adicional como la Modalidad 40.

Lo que sí puedes hacer: aunque aquí no abordamos herramientas específicas, es recomendable que toda persona sepa cuál será su salario promedio, en qué rango de la tabla del Art. 167 se ubica, y cuántas semanas tiene reconocidas oficialmente.

 

8. No considerar los tiempos del IMSS y la AFORE

El proceso de pensión no es automático ni inmediato. Hay trámites ante el IMSS, traslados de recursos en la AFORE, validaciones de datos… y todo eso toma tiempo.

Errores frecuentes

  • Pensar que en una semana estará todo listo

  • No dejar un margen de seguridad para imprevistos

  • Agendar citas con plazos muy cortos

Lo que sí puedes hacer: infórmate sobre los plazos promedio del IMSS y de tu AFORE. Si estás próximo a cumplir 60 o 65 años, comienza a prepararte al menos 3 meses antes.

 

9. No tener un beneficiario claro o actualizado

En caso de fallecimiento, ¿Sabes quién podrá solicitar la pensión por viudez, orfandad o por ascendencia? Muchas personas no tienen claridad sobre quién es su beneficiario registrado o si su documentación está en orden.

Esto se vuelve particularmente importante si hay:

  • Divorcios previos

  • Hijos de distintas parejas

  • Padres aún vivos como posibles beneficiarios

Lo que sí puedes hacer: verifica que tus beneficiarios estén registrados correctamente en el IMSS y en tu AFORE. Y si tienes testamento, asegúrate de que sea congruente.

 

10. Pensar que puedes hacer todo tú solo

Sí, puedes iniciar tu trámite por cuenta propia. Pero si no conoces los pasos, los requisitos o cómo interpretar tu historial, puedes perder oportunidades o cometer errores irreversibles.

Un error común es creer que “con ir al IMSS me explican todo”, sin tener claridad sobre tu situación. El IMSS solo actúa como autoridad ejecutora, no como asesor personal.

Lo que sí puedes hacer: rodéate de información confiable, infórmate desde antes y si puedes, busca acompañamiento profesional que actúe con base en normativa y experiencia.

Conclusión 

Prepararte sí hace la diferencia

Los errores que hemos visto aquí no son accidentes aislados. Son síntomas de una falta de preparación, y en muchos casos, de desconocimiento. La buena noticia es que todos ellos pueden prevenirse.

Revisar tus documentos, verificar tus datos, anticipar tus pasos y entender tu contexto normativo son tareas clave. No necesitas tenerlo todo resuelto hoy, pero sí dar un paso cada semana.

Tu retiro no debe ser una carrera contra el reloj, ni un laberinto sin salida. Puede ser un proceso ordenado, informado y seguro.